Isa Álvarez, mucho más que una central para apuntalar la zaga nazarí

 

Isa Álvarez en su primera imagen como nueva futbolista rojiblanca | Foto: Granada CF

El Granada continúa perfilando poco a poco una de las plantillas que, pase lo que pase, quedará para la historia como la del regreso de las rojiblancas a la máxima categoría. En ese intento por que nada falle, los despachos del club siguen trabajando minuciosamente para confeccionar esta temporada tan esperada e ilusionante e incorporar piezas al proyecto que, sumadas a las que ya están, mantengan las licencias para soñar en los nuevos retos que se le vienen al equipo. 

La calidad y la proyección están siendo dos de los rasgos definitorios de la política de fichajes que está llevando a cabo el Granada en este mercado veraniego. Unos atributos que se ajustan a la perfección a Isa Álvarez, la décima jugadora en incorporarse a la disciplina granadinista y que, además, suma uno muy del gusto de cualquier entrenador: la polivalencia.

La futbolista natural de Fuensalida (Toledo) llega, a priori, para reforzar el puesto de central, que perdió un efectivo con la salida de Paula Andújar -jugará el próximo curso en el Olympia-. Sin embargo, el eje de la zaga, si bien es la posición en la que más se le ha podido ver en los últimos años, no es la única que ha desempeñado la jugadora procedente de la UDG Tenerife que, en sus inicios, ocupó el rol de mediocentro defensivo y a la que también se le ha visto probar en el lateral izquierdo. Tres futbolistas en una para Roger Lamesa en una plantilla que, sin ir más lejos, la temporada pasada ya dio muestras de su polivalencia. 

Otra historia de superación con el LCA como protagonista

Desde sus inicios en el FF La Solana, el CD Parquesol -equipo con el que debutó en Segunda- y el Fundación Albacete, Isa Álvarez fue quemando etapas en una trayectoria en clara progresión ascendente que le llevó a la que iba a ser su primera gran oportunidad de dar el salto a la Primera División con su fichaje por el Granadilla Tenerife. Sin embargo, poco después de firmar por el conjunto tinerfeño, el LCA volvía a aparcar los sueños de una futbolista más. Tras catorce largos meses de trabajo en la sombra, el fútbol ganó una batalla más al LCA con la vuelta de Isa Álvarez a los terrenos de juego en el encuentro que enfrentaba al filial de la UDG frente al Córdoba. Después de un curso en la categoría de plata en el que ir recuperando sensaciones, el fútbol le devuelve a la polivalente central toledana su recompensa al esfuerzo en forma de una segunda oportunidad de progresar en la máxima categoría junto al Granada. Y al equipo nazarí, de hacerse con los servicios de una futbolista que ha demostrado a lo largo de su carrera seguridad defensiva, buen trato de balón y una polivalencia que puede ser clave de cara a una temporada de máxima exigencia.